Hace 48 años, en el popular barrio de Santa Ana, nació un niño que se atrevería a romper los esquemas mentales de mucha gente. Un hombre que hoy triunfa en el mundo, dejando a Panamá en una prominente posición en un estilo de pintura muy interesante, él es Vladimir Barrios.
Nos cuenta que desde que su memoria logra alcanzar, amó el arte. Pero no solo lo amó, también lo soñó y se enfocó en perseguir ese sueño hasta hacerlo una realidad. Hoy Vladimir puede decir que los sueños si se realizaron, porque ya no están en su cabeza solamente; ahora los lleva a los lienzos y esos lienzos están colgados en importantes galerías del mundo.
Estudió en el Instituto Nacional de Cultura, INAC, hoy Ministerio de Cultura. Incursionó en la pintura destacándose en el Neo Cubismo, el arte abstracto geométrico con una fuerte inclinación al Neo Expresionismo.
Países como México, Alemania, España, República Checa, Francia, Mónaco y por supuesto su patria Panamá, han sido testigos de sus muestras. Tiene intenciones de incursionar en la escultura, arte que quiere desarrollar con igual pasión que la pintura. También ama la música, aunque reconoce entre risas que no toca ningún instrumento.
Sin duda es un orgullo para su familia, para su barrio y para su país.