Panamá, más allá de ser puente del mundo

Los servicios de valor agregado: el siguiente paso para la competitividad logística y marítima de Panamá

El país no solo debe aspirar a mantener su posición como hub de trasbordo internacional, sino empezar a generar un valor agregado a la carga que reciben.

Por: Argelys Quiel; Boris Rios; Dalys Saldaña Bernal; Earmy Carcache; Joaquín Vázquez; Lorenzo González Palma.

La privilegiada posición geográfica de Panamá históricamente ha sido aprovechada para el comercio internacional y la generación de múltiples activos logísticos, que en la actualidad se consideran de clase mundial.

Sin embargo, para mantener el dinamismo y competitividad de este sector de requiere de una constante actualización, un proceso que implica investigación e inversión, digitalización, visibilidad, innovación tecnológica y formación de capital humano.

Los esfuerzos para lograr estos objetivos son apremiantes, en un sector logístico y marítimo a medio desarrollar.

En el tapete existe un proyecto de Estrategia Logística Panamá 2030, donde autoridades gubernamentales como el sector privado esperan que el país pueda ir un paso más allá en el mundo del comercio internacional.

La intención es que Panamá no solo sea considerado como un hub de tránsito, sino que pueda comenzar a generar un valor agregado a la mercancía que reciben.

Este escenario se traduciría no solo en notables beneficios económicos para el Estado en materia de importación, sino en una gran fuente de empleo para los panameños.

En la actualidad, al menos 20% del PIB del país es generado por el sector logístico.

En el marco de la actividad de Expo Logística Panamá 2023, encuentro de negocios especializado en el área logística, el administrador de la Autoridad Marítima de Panamá, Noriel Araúz, señaló que el sector logístico ha demostrado estar preparado para las peores batallas y en ningún momento a cedido ante las dificultades, se ha mantenido de pie y trabajando para evitar que la economía global colapse. “Sin embargo, hay muchos retos por delante. El sector logístico necesita seguir trabajando en pro de mejorar su posicionamiento ante otros sectores”, agregó Araúz.

En este marco, el Dr. Eduardo Ortega Barría, secretario nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, afirmó que: “Al hablar de comercio internacional, conectividad o de infraestructura moderna para el transporte de mercancía, carga y personas, nos referimos también al fuerte componente de ciencia, innovación y avances tecnológicos detrás, justamente las áreas generales de fomento y desarrollo de la Senacyt”.

Liderando el trasbordo internacional
La condiciones son favorables para “pisar tierra firme” e incrementar el aporte del sector logístico nacional. Panamá cuenta con cinco puertos de clase mundial en la zona interoceánica, contiguos al Canal de Panamá, que a la vez están conectados por el Ferrocarril Interoceánico y la Autopista Panamá – Colón.

Estas infraestructuras, junto con los puertos, permiten ofrecer un puente terrestre para enviar carga del Pacífico al Atlántico y viceversa. Lo que se denomina cargas de trasbordo, escenario donde Panamá es líder.

A pesar de los efectos colaterales causados por la pandemia del Covid-19, en los últimos tres años el país presentó un mayor volumen de carga contenerizada en tránsito.

En el 2020, el tráfico de carga en el Canal de Panamá disminuyó un 4,8 % en comparación con el año anterior, pero en los primeros meses de 2021 el tráfico de carga ha aumentado en un 8,4% en comparación con el mismo período en 2020.

A juicio de Rommel Troetsch, ex presidente de la Cámara Marítima de Panamá, esto fue un fenómeno poco usual. “Los puertos de trasbordo por lo general crecieron durante la pandemia. Esto le permite al Estado cobrar más impuestos por carga movida en el formato de trasbordo”.

Panamá es líder en Pacífico y el Atlántico en el mercado de trasbordo de carga, con más del 50% y 43%, respectivamente.

Como país, Panamá mueve el 47% del volumen total de carga en el Caribe y en el Pacífico, es un liderazgo que trasciende hemisferios en el manejo de carga o contenedores de trasbordo.

“Este volumen de carga es muy importante porque se les puede dar otros servicios de valor agregado, como, por ejemplo: servicios de etiquetado, última manufactura, reparaciones, paletizado, almacenaje y redistribución, entre otros. Ese es el siguiente paso o industria por desarrollar”

Rommel Troetsch

Esto representaría una ventaja para seguir creciendo en logística y transporte. Por ello el sector portuario tiene puesta su mirada en ampliar el radio de servicios y aprovechar sus bondades como nuevo rubro exportable en el sector marítimo y logístico nacional, tal como lo señala la Estrategia Logística Nacional 2030 del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

En este conglomerado de servicios entran en juego las zonas francas, las cuales están ubicadas estratégicamente en nuestro territorio, para propiciar la instalación de empresas que tengan la oportunidad de ofrecer sus productos al mundo.

Esta ventaja de estar ubicados cerca de los puertos y del aeropuerto, les da a las empresas la flexibilidad de colocar los productos finales muy cerca de los mercados.

La poca demanda provoca la caída de los fletes marítimos

Este tipo de iniciativas y estrategias, que aspiran a la competividad del sector, cobran relevancia ante un escenario mundial lleno de incertidumbre.

Los fletes han caído a los niveles del año 2019. Las navieras después de tres años de pandemia, período en el cual lograron incrementar su facturación, se encuentran en una etapa de poca demanda de carga.

China ha disminuido su producción a falta de demanda, como consecuencia de ello los fletes han “caído”.

Por parte las navieras, aumentaron el costo del flete, lo que llevó a que los importadores y exportadores llenaran sus bodegas para poder abastecer el mercado, y ahora tienen que dar salida en un escenario de menor consumo. Y es que la inflación ha provocado que los consumidores dejen de comprar, de acuerdo con el último análisis de freightos (mercado de carga online). El portal de información marítima de Latinoamérica ha reducido las previsiones de crecimiento producto de las condiciones económicas mundiales.

Se estima que, tanto en Europa, como los Estados Unidos y Latinoamérica, las tarifas van a seguir disminuyendo.

La poca demanda de producción de China ha obligado a muchas empresas navieras a sacar de servicio o navegación a buques portacontenedores.

“Actualmente existen más de 122 barcos portacontenedores fuera de servicio, algunos están en mantenimiento o reparación, pero la mayoría han sido sacados por decisión de las navieras, a raíz que no hay suficiente carga y los fletes están bajos”, recalcó Troetsch.

Esta situación es preocupante ya que los importadores dependen en gran medida de lo que ocurre con el costo de los fletes.

La demanda mundial de carga aérea no escapa a esta situación. Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional, el tráfico mundial cayó un 14,9% en enero con respecto al año anterior.

Se espera un año difícil. Durante el mes de enero Panamá creció sus dígitos en el trasbordo de contenedores, pero para febrero se dio una disminución, con un balance negativo del primer bimestre del 2023.

Los analistas son optimistas y ven una luz en el túnel para el segundo semestre, donde históricamente se origina un mayor movimiento de carga. Contrario a lo que sucede hoy día donde la demanda a caído, producto de los excesos de inventario.

Es importante resaltar que el trasbordo de mercancía funciona diferente de las importaciones y exportaciones. Es decir, cuando los mercados caen generalmente el trasbordo de carga aumenta ya que las navieras prefieren utilizar este mecanismo, que enviar buques de mayor dimensión de origen a destino porque no les resulta rentable. Una dinámica que puede ser aprovechada por el territorio canalero.

De acuerdo con el ex presidente de la Cámara Marítima de Panamá – CMP, se espera que este sea el caso de Panamá y no ocurran mayores afectaciones por la caída global de la carga.

El paso a la competitividad

Tanto las autoridades gubernamentales como el sector privado esperan que el país pueda ir a un paso más allá en materia de competitividad ante el comercio internacional.

Con la finalidad de potenciar la conexión del país como centro de operaciones logísticas para la región.

“El propósito es que la industria mantenga el crecimiento y el dinamismo que la han caracterizado, tanto para su competitividad como para el desarrollo económico del sector logístico panameño, eje fundamental de nuestro desarrollo como país y de la región”, expresó Marcela Galindo, presidenta de la Cámara de Comercio, Industria y Agricultura de Panamá (CCIAP), durante su intervención en la pasada feria de Expo Logística Panamá 2023.

En lo que respecta a la Ampliación del Canal de Panamá y algunas acciones portuarias recientes, para aumentar la capacidad de manejo de carga marítima, han mejorado la competitividad del país puesto que el 6% del comercio mundial transita por esta vía interoceánica.

En la opinión de algunos expertos, el país carece no solo de una política prioritaria de “frente al mar”, sino que tampoco cuenta con sendos astilleros que puedan brindar múltiples servicios a la industria marítima y auxiliares, no se han logrado los embalses indispensables para aumentar el calado del Canal de Panamá, ni se ve cerca la construcción de una nueva vía férrea paralela al Canal, pero del lado Oeste, entre otros aspectos.

Por el lado del modelo de negocio que implica el Registro de Buques desde 1,917, se ha consensuado modernizar la Ley 57 de 2008 y aumentar la competitividad de la Autoridad Marítima de Panamá – AMP, en lo que respecta el abanderamiento de naves y la digitalización de los servicios que eviten perder la atracción de los armadores en el registro de naves del país. En pocos meses iniciará el debate en la Asamblea Nacional.

El posicionamiento que tenemos como hub logístico de las Américas es innegable, pero no suficiente frente a un mercado internacional retado por la globalización. El giro de timón debe ir hacia la diversificación y en brindar valor agregado a la carga que transita por el Canal de Panamá.

El plan estratégico nacional debe marcar la hoja de ruta para buscar la atracción de carga a Panamá, agilizar los trámites y digitalizar todos los procesos aduanales.

Lograrlo dependerá de tener un sector marítimo y logístico fortalecido para hacer frente al escenario post pandemia y mantener nuestro liderazgo.