Adultas mayores del distrito de San Miguelito se certificaron en curso de costura y bordados a mano

Un total de 19 mujeres del distrito de San Miguelito culminaron con éxito un curso de costura y bordado español a mano. Las mujeres, la mayoría de ellas adultas mayores, son residentes de corregimientos Colmena, como lo son Mateo Iturralde, Amelia Denis de Icaza, Belisario Porras, Arnulfo Arias y Belisario Frías.

El curso tuvo una duración de tres meses y fue dictado por una experimentada maestra costurera que les enseñó a las mujeres a confeccionar toallas, sabanillas, cojines, juegos de fundas para baños y camisas con la técnica de bordado español.

La ministra Castillo indicó que invertir en las mujeres, que representan el 50% de la población, es promover la movilidad social y fomentar un desarrollo económico donde todos y todas tengan las mismas oportunidades.

El objetivo a mediano plazo de estos cursos es que las participantes accedan a otros módulos donde aprenderán otras técnicas que les ayudará a confeccionar artículos como bolsos, trajes, gorros, manteles y otros de alta demanda.

La instructora Ilka Ávila acotó que las participantes estuvieron muy animadas durante el curso. Todas aprendieron a coser, cortar telas, tomar medidas, hacer moldes y diseños complejos.

Para Yessika Guerra, de 51 años, este curso le ayudó a instalar un pequeño taller en su casa, ubicada en la comunidad de Tierra Negra, en el corregimiento de Mateo Iturralde. Aquí tejen sabanillas, toallas y cojines que les encargan sus vecinos.

“Al principio me costó, pero la perseverancia y las ganas de aprender me ayudaron. Lo que me gusta de este emprendimiento es que me permite atender mi hogar, manejando mi propio horario. Quiero seguir aprendiendo hasta diseñar bolsas y trajes”

comentó Guerra.

Mientras que Elizabeth Torres, de la comunidad de Santa Marta, en el corregimiento de Belisario Frías, ha logrado comercializar con éxito sus diseños, siempre esmerándose en ofrecer un buen servicio y buenos precios.

“Tener mi propio negocio y ayudar con los gastos de la casa, era algo que jamás había pensado, pero de la mano de la instructora, que fue muy amable y paciente, lo pude lograr. Estoy muy contenta porque estoy preparada para trabajar desde mi casa. Poco a poco iré aprendiendo, lo importante es que tengo la voluntad y la ganas”

expresó Torres.

En la entrega de los certificados participaron autoridades locales que ayudaron a promover estos espacios.