El histórico edificio que al principio del siglo XX fue llamado Palacio Nacional, donde se alojaron los tres órganos del Estado, hasta que finalmente el presidente decidió trasladarse al Palacio de Las Garzas; posteriormente, se convirtió en la Secretaría de Gobierno y Justicia; después, Ministerio de Gobierno y Justicia y finalmente, desde el 2010, Ministerio de Gobierno, pasó a ser un Museo de Historia.
Ahora, le corresponderá al Ministerio de Cultura, Patrimonio Histórico y a la Oficina del Casco Antiguo desarrollar la estructura como un sitio del entorno turístico del área.
“La sencilla pero monumental belleza del antiguo hemiciclo de la Asamblea Nacional, los retratos presidenciales y los detalles neoclásicos mediterráneos del Salón Medallones o la clara magnificencia del Salón Nacionalidad. Conciertos y obras escénicas en el Patio Central bajo la cubierta de policarbonato. Eso nos hace recordar que el edificio, casi un ser vivo, pertenece a todos. Entonces, ¿qué mejor marco para instalar en algún momento el nuevo Museo de Historia de Panamá para beneficio y admiración de todos? Y mejor aún, con la inclusión de otro museo paralelo de los Pueblos Originarios”
Expresó el ministro de Gobierno, Roger Tejada Bryden.
El titular de Gobierno, agregó que con esta intención y con visión de futuro entregó simbólicamente las llaves del Palacio Nacional a la señora ministra de Cultura, Giselle González Villarrué.
Tejada cerró un capítulo más de la historia como último ministro de Gobierno que se hospedó en este edificio, que guarda celosamente en cada pasillo y rincón parte de la vida no sólo de un país; sino, de miles de ciudadanos que conformaron el funcionariado dedicado a laborar por Panamá.
El ministro de Gobierno, Roger Tejada, en una velada cultural dio gracias todos aquellos que trabajaron a través del tiempo por la secretaria de Gobierno y Justicia, Ministerio de Gobierno y Justicia y finalmente, hoy Ministerio de Gobierno.
Durante la entrega del edificio, se realizaron exposiciones de las piezas arqueológicas descubiertas en El Caño, provincia de Coclé, artesanías de los privados de libertad y de los pueblos indígenas, fotos de momentos de la historia patria y un espacio dedicado a Victoriano Lorenzo donde se presentaron documentos y la espada del cholo guerrillero.